Al final ho han aconseguit. A nosaltres també ens han convertit en banc.
S'ha produït el pitjor dels escenaris possibles. Tots els elements han anat en contra: el metereòleg que no va pronosticar una tempesta com aquesta, l'armador que volia sempre més i més, el capità que va ser més agosarat del compte i
la magnitud de la tormenta, desconeguda fins aquell moment.
la magnitud de la tormenta, desconeguda fins aquell moment.Ja està, des del passat 28 de juliol s'han traspassat tots els actius (excepte quatre quadres i algun edifici) de les fins fa poc ben llustroses CaixaManlleu, CaixaSabadell i CaixaTerrassa a una entitat que aprofita el nom de la fins fa poc nounata Unnim. Serà a Manlleu (a tocar de Vic, que en saben força d'això de misses), espero que els facin un enterro digne.
És una llàstima que un model que ha durat tants anys i que sempre ha tingut un fonament social ben clar, en els últims quinze anys una colla d'ambiciosos les hagi portat a la ruïna. La desmesura a l'hora de comercialitzar (veneu, veneu covards!) ens ha portat fins a la porta de l'infern. Per cert, aquest tema dóna per a fer un nou post: Algú pensa que pel mateix camí comercial anem bé?
Aprendrà algú la lliçó? I la labor de les caixes, qui la farà a partir d'ara?
Mentrestant, el negoci en essència de les caixes, ja se l'emporten bancs com Triodos, amb el qual la gent, en moments de tanta indignació, es va sentint cada dia més còmode...
Una cosa no quita a la otra. Quiero decir que tampoco estamos a las puertas del infierno: ahora las cosas están más claras, toca tener beneficios, cuantos más, mejor (pagando el 30% al impuesto de sociedades para contribuir al heraldo público), repartir dividendos a los accionistas y aportar fondos a la Obra Social para fines de interés social. Lo único que para hacer todo esto ya no vale el cuento en el que han vivido nuestros directivos los últimos años. Por fin ahora hay alguien que se juega su dinero, y seguro que no va a permitir los dispendios que se han hecho desde siempre en las Cajas. Se acabó el cuento, ahora toca trabajar de verdad para conseguir beneficios. También es comprensible el disgusto del anfitrión de este foro por la cuenta que le trae. Aquí todos hemos vivido muy bien durante mucho tiempo y sin grandes complicaciones, viajes a cuerpo de rey, buenas pagas variables , buenas condiciones laborales, el si a todo para los sindicatos… vamos a ver que pasa a partir de ahora y a saber cuánto vale un peine.
ResponEliminaSí, pero dependiendo de quien sea el "privado" que se juegue el dinero, a lo peor decide que una buena manera de sacar beneficio es, no sólo acabar con determinados dispendios, sinó recortar por uno de los sitios más fáciles: la plantilla.
ResponEliminaDesconozco el tipo de vida que hayas podido llevar. Si bien, imagino que debes haber estado situado en la "parte buena de la manzana". En mi caso te diré que en absoluto echaré de menos los viajes a cuerpo de rey, y mucho menos las pagas variables a que haces referencia. Quizás esta falta de añoranza sea debida a que nunca los he conocido y mucho menos disfrutado.
ResponEliminaLos que siempre hemos sido "empleados de trincheras" NUNCA, hemos vivido muy bien (como tú dices¡¡¡¡), muy al contrario siempre hemos sido la fuerza de choque a la que en momentos de "bonanza" se ha escamoteado cualquier beneficio que saliese de lo estrictamente marcado, y sin embargo, a quienes siempre se ha presionado con objetivos a cumplir (la mayoría de las veces "sobredimensionados").
En todos los casos, si se obtenía un resultado "decente" el éxito era atribuído (o mejor se lo atribuía él directamente) al Jefe de Zona de turno).
Si por el contrario la campaña era un fracaso total, la culpa era de los "empleados de trinchera" quienes con ello demostraban su poca implicación con la empresa).
Y se podría seguir con muchos más ejemplos.
Lo que sí es seguro, que ocurra lo que ocurra con UNNIM, los máximos perjudicados, seguiremos siendo los mismos. ¿Adivinas quién?